Los pacientes Alarcón y Casco fueron derivados desde Victoria hacia Paraná. Están sedados y con respirador. «Movilizarlos para cualquier estudio básico es muy riesgoso», informaron desde la guardia.
Los pacientes Alarcón y Casco, «están extremadamente grave. Uno de ellos presenta más del 90% de su cuerpo quemado, y otro, tiene una gran afección en el rostro, cuero cabelludo y espalda. No somos muy optimistas con respecto a la posibilidad de sobrevida» porque «no registran evolución alguna, más que su capacidad de respirar», dijo el doctor Carlos Bantar, director del Hospital San Martín.
Por su parte, el Jefe de la guardia del shockroom, Maximiliano Quindt, aseguró que en horas de la tarde de este ayer ambos pacientes «continúan en estado crítico, siguen sedados por el dolor y, además, están con asistencia mecánica-respiratoria».
Negó que haya posibilidad de traslado porque «no están aptos, tienen lesiones compatibles con el contacto directo con el fuego. Movilizarlos para realizarles estudios, por más básicos que sean, es muy riesgoso. Seguimos peleando para compensarlos. Hasta el momento no se necesitan dadores de sangre. Hace mucho que no tenemos un caso así».
