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Absolvieron a los asambleistas de Gualeguaychu y hubo festejos en la puerta del Tribunal

El Fiscal General del Tribunal Oral Federal (TOF) de Paraná, José Ignacio Candioti, no acusó a los activistas de la Asamblea Ciudadana Ambiental de Gualeguaychú (Acag) por el accidente que le provocó la muerte a Walter Maulucci, quien se estrelló contra un acoplado que impedía el paso en una ruta internacional en víspera de una marcha contra el funcionamiento de la ilegal y contaminante planta de pasta de celulosa de UPM (ex Botnia) en Fray Bentos. Miguel Argentino Pérez dijo a AIM que “la señora Justicia no podía ser injusticia y obró como tal”, y reivindicó la lucha ambiental.

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Mientras en la sala del TOF se escuchaban las palabras de Candioti, en la puerta del edificio estaban integrantes de la Acag esperando tensamente el resultado del proceso que concluyó este viernes con la absolución de Miguel Ángel González y Miguel Argentino Pérez, ya que el Fiscal no acusó.

“Más allá de la alegría para Pérez y Gonzáles acá hay que destacar que esto se termina y valorar la actitud de Candioti, ya que hizo lo políticamente incorrecto porque para él hubiera sido más fácil acusar y que el Tribunal resuelva pero pidió la absolución y eso reivindica la independencia del poder Judicial y del fiscal, quien veló por los principios de imparcialidad y legalidad”, remarcó el abogado de la Acag, Luis Leissa, más allá de que apuntó que Candioti “demostró que no hubo ningún tipo de pruebas que permitieran decir que Pérez o Gonzáles pusieran el acoplado o fallaron que por omisión en la colocación de señales porque quedó acreditado que había señales”.

Tras conocerse la absolución Gonzáles tuvo una descompensación y Pérez festejó alegremente en la puerta del TOF con integrantes de la Asamblea y activistas de la Red Ecosocialista.

“No, no y no: que se vayan a la…”, coreaba alegremente el ecologista, quien indicó a esta Agencia que pensaba que “realmente la señora Justicia no podía ser injusticia y obró como tal”, aunque indicó que nunca pensó que se lo iba a juzgar o criminalizar: “no soy un criminal, no soy culpable, lo que pasó fue un hecho desgraciado y lamentable que nadie quiso”.

Ante ese escenario, el ecologista reivindicó la lucha para el cuidado del medio ambiente, ya que afirmó que “esto que está pasando es un ecocidio; Botnia son las cámaras hitlerianas al aire libre y matan todo”.

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