La dirección del PAMI llenó las páginas de todos los diarios por días. El profesor Krauth, en su breve carta, logra esquivar la grosera confusión que las cuestiones morales suelen generar… y la puta que los parió….
Contexto
Toda acción humana debe juzgarse según su contexto histórico. Antes que nada quiero aclarar que siempre pensé que quien ocupa un cargo político en el Estado (ya sea Nacional, Provincial o Municipal), debía atenderse él o ella y su familia en hospitales públicos, enviar a sus hijos a escuelas públicas y vacacionar dentro del país. De manera que los ingresos que recibiera (con toda razón y justicia por su servicio al Estado), fueran gastados, en el período en el que desempeñara el Cargo Político, en hoteles, restaurantes, cines y lugares de esparcimiento dentro de nuestro país. Sé que puede haber personas que opinen distinto y que crean que no podemos obligar a nadie, sea quien sea, a que pase su tiempo libre o vacacione en determinados lugares. Bien, como decía al principio, todo tiempo tiene un contexto determinado. No vivimos en Suiza, ni en Alemania, ni en los Países Bajos; vivimos en un país con más del 50 por ciento de inflación anual, con más del 45 por ciento de pobres, en medio de una pandemia, con marginalidad creciente, con restricciones de todo tipo para la compra de moneda extranjera y para el envío de moneda extranjera al exterior (prueben si pueden enviarle algo de dinero de ayuda a algún familiar que se encuentre fuera del país). Ese es nuestro indiscutible contexto, busquen las razones que quieran y échenle la culpa a quien se les cante, pero ese es el contexto. En ese contexto, la directora del PAMI se va de vacaciones a uno de los lugares más selectos del Caribe mexicano con su pareja, que casualmente es su segundo dentro del organigrama del Instituto que dirige. Pregunto ¿no es un tema sobre el que, al menos, podamos debatir y recibir algún tipo de explicación?
En lugar de esto, la vocera o portavoz del presidente, de manera absolutamente autoritaria, clausura el tema, «el tema está terminado», declara muy suelta de cuerpo con una impunidad que sólo la ignorancia o la mala intención pueden otorgar. Imaginemos por un momento cuales hubiesen sido las declaraciones de la vocera si la actitud de «Luana» hubiese sido la de un funcionario de la oposición. Seguramente; también, algunos simpatizantes del hoy Partido gobernante, se habrían encadenado en el aeropuerto de Ezeiza para repudiar a la o el funcionario y hubiesen cortado la autopista Richieri en señal de protesta para desenmascarar a esos funcionarios poco solidarios y sin empatía con el pueblo sufriente, que se van a gastar los abultados sueldos que son pagados por los pobres a exclusivas playas en paraísos que ni remotamente, alguna vez, podrá conocer el 99 por ciento de los argentinos, (y mucho los afiliados al PAMI). Tal vez es eso lo que tendríamos que haber hecho, porque eso es exactamente lo que pasó.
La puta madre que los parió
Amablemente
Enrique Krauth
