En 18 sucursales del Banco Nación productores y cooperativistas que integran el Comité de Crisis entregaron el petitorio por el que se reclama a la institución financiera una línea de crédito flexible para el sector por 1.600 millones, confirmaron a AIM. En algunas sedes hubo fuerte presencia policial.
La medida —acordada en la última asamblea que se realizó en Paraná frente al edificio histórico del banco estatal— se replicó en 18 sucursales instaladas en la provincia, en las que se entregó el petitorio por el que se reclama una línea de crédito de 1.600 millones de pesos para la actividad, con un año de gracia y cinco de financiamiento y se informó a los funcionarios sobre la situación de los productores en cada localidad.
La acción se desplegó en Villaguay, San Salvador, Lucas Gonzales, Nogoyá, Crespo, Ramírez, Diamante, Bovril, María Grande, Viale, Concordia, Gualeguaychú, Gualeguay, La Paz, Urdinarrain y Tala, entre otras localidades.
“Se agotan todas las instancias de diálogo por la gravedad de la circunstancia”, aseguró a esta Agencia el secretario de la Federación de Cooperativas de Entre Ríos (Fedeco), Daniel Kindebaluc, quien lamentó que “no hay ningún tipo de respuesta”, por parte de la entidad más allá de la voluntad del gobierno provincial de ser garante del financiamiento con la coparticipación.
La jornada en toda la cartografía entrerriana “expresó el descontento de los productores con la entidad de manera pacífica”, aseguró a AIM el director del tercer distrito de Federación Agraria argentina (FAA), Elvio Guía, quien resaltó que “no fueron movilizaciones con tractorazo, sino que grupos de productores se apersonaron en las sucursales de los bancos en los que mantuvieron audiencias con los gerentes”, pero advirtió que según las respuestas que se obtengan “se van a endurecer las protestas, ya que está toda la capacidad de movilizar fuertemente a las sucursales a las que se fue hoy”. La negociación se hizo prudentemente en cada localidad porque desde el sector apuestan al diálogo coincidió Guía con Kindebaluc, quien detalló que el objetivo es saber dónde se está parado y que los funcionarios del banco sepan cuál es la realidad agropecuaria y lo transfieran a las autoridades máximas, para que se generen los créditos en el marco de un plan de salvataje para el sector.
Además, el federado subrayó que se demostró a los gerentes que el problema que hoy tienen los productores “no es de un grupo sino que se vive en toda la provincia con todo lo que es la producción, no solamente de granos sino, también, las economías regionales (cítricos dulces y arroz) y la lechería”.
Por otro lado, Guia volvió a denunciar que el banco es una herramienta de persecución política y una bolsa de empleo, ya que argumentó que “a productores que tienen soja se les niega líneas de crédito, lo que lastima al pequeño y mediano productor, porque los que tienen grandes cantidades de soja no van a los bancos; y funciona como agencia de colocación de empleo, ya que se designó de directora a (Delfina Rossi) una chica de 26 años, hija de Agustín Rossi (del ministro de Defensa), lo que es tomarle el pelo a los empleados del banco y a los clientes”.
Ante este escenario, el dirigente avisó que los tiempos “se comienzan a acortar y cada vez es más difícil contener a la gente que se encuentra en un estado de desesperación, ya que se acerca una campaña y las cooperativas no tienen ninguna capacidad de financiar”, dijo el productor, quien exhortó a las autoridades a dar una respuesta, sobre todo, del gobierno provincial “si no se endurecerá la lucha de vuelta y se podría volver a la ruta o instalar un nuevo acampe”. Sin embargo, Kindebaluc especificó que en estos días se realizará una nueva reunión del Comité de Crisis, para ver cómo seguirán las acciones.
