Lo anunció el intendente Enrique Cresto junto a vecinalistas de los barrios Don Jorge, Monseñor Rosch, General Lamadrid, Juan XXXIII, La Colina y La Bianca. Se trata de familias que, en algunos casos, hace más de veinte años se encuentran viviendo en terrenos sin acceder a toda la documentación correspondiente. A través del Programa Municipal de Regularización Dominial «Mi Casa», que ya benefició a más de 800 familias en los primeros años de gestión, ahora se inicia la regularización de más de mil hogares, que tras pagar una cuota mensual accesible obtendrán la titularidad del inmueble.
Junto a la presidenta del Instituto de la Vivienda y Tierras Autárquico Municipal (INVyTAM, Arquitecta Marina Peñaloza, Cresto les informó a los vecinalistas que a partir del primer día de noviembre el equipo de Regularización Dominial llevará adelante el censo correspondiente en los barrios involucrados, remarcando que es importante que estos vecinos entiendan el esfuerzo que realiza la Municipalidad en este sentido, articulando con los colegios de profesionales y realizando gestiones ante organismos provinciales, por lo tanto deben cumplir con el pago de las cuotas para seguir con el programa.
“Acá estamos hablando que más de mil familias van a estar accediendo al Programa Mi Casa y en esta ocasión lo que estamos haciendo es informarle a los vecinalistas, para que ellos después le trasladen la información a las familias, que durante noviembre vamos a realizar este censo en cada uno de estos barrios” remarcó el Presidente Municipal.
El censo, que se realiza en el marco de las políticas de Desarrollo Barrial que lleva adelante el municipio, se realizará durante el mes de noviembre y alcanzará, en forma progresiva a los barrios Don Jorge, Monseñor Rösch, General Lamadrid, Juan XXIII, La Colina y La Bianca, en las zonas donde se encuentran ex asentamientos o viviendas en situación irregular. El jefe comunal explicó que son terrenos que pertenecían a la Provincia y que tras un trabajo realizado «con el Gobernador Gustavo Bordet y con la Legislatura Provincial, se logró la transferencia de las tierras lo que nos permite ahora continuar con este paso».
Cada familia beneficiaria ingresará en el Programa accediendo a un plan cuyo valor de la cuota variará dependiendo de la extensión del terreno, la zona, entre otras variables, y acorde a la situación de cada familia, siendo accesibles. «Es muy importante que los vecinos paguen las cuotas, porque los valores de estos terrenos no se comparan con lo que podrían llegar a pagar en el mercado inmobiliario” además de que estos fondos que ingresan “le permite a la Municipalidad y al INVyTAM continuar con el programa, beneficiando a más familias”, concluyó Cresto.
