El senador de Cambiemos – Victoria presentó un pedido de informe a la ministra de Gobierno y Justicia Rosario Romero por los hechos ocurridos en la Unidad Penal Nº5 de Victoria y las cinco muertes dentro de uno de sus pabellones.
El senador de Cambiemos por el departamento Victoria, Roque Ferrari, se refirió al pedido de informes que le realizó a la ministra de Gobierno y Justicia Rosario Romero a raíz de los hechos ocurridos en la unidad penal de Victoria, en la cual fallecieron cinco internos en el marco de una emboscada de otro grupo de detenidos. Durante su testimonio radial quedó al desnudo que los legisladores votaron la Ley de Narcomenudeo a sabiendas que aumentaría los problemas de sobrepoblación en las cárceles de la provincia y reclamó por la construcción de más establecimientos carcelarios.
«Este es un hecho que desgraciadamente tuvo repercusión provincial y nacional. Sabemos que el tema carcelario en el país ha colapsado y nosotros queremos que definitivamente se comience a solucionar este problema. Desde Cambiemos habíamos presentado un proyecto, en virtud del cual le pedíamos al Ejecutivo provincial como una medida alternativa y hasta tanto se logre solucionar este problema, que gestionara a través de las autoridades nacionales algún establecimiento del Ejercito para establecer una unidad penal, acondicionada por supuesto», señaló Ferrari.
Luego, el senador explicó que «la unidad penal de Victoria es una carcel que está desbordada en su alojamiento, había más de 150 internos y cuando normalmente ha habido entre 60 y 70 como máximo», aseguró en declaraciones a FM Universidad.
«La puesta en vigencia de la Ley de Narcomenudeo es otra medida más, que si bien ataca un flagelo importante que tiene la sociedad, también de alguna manera trae aparejado que la detención de personas no tienen lugares en las unidades penales. Si usted lo escucha al presidente del Superior Tribunal de Justicia lo ha manifestado, preguntando donde van a poner a los presos. Esto es lo que realmente nos preocupa», expresó.
Ante la pregunta sobre por qué no se escuchó a especialistas de otras provincias, quienes advirtieron sobre los límites prácticos y de resultado que tenía la Ley de Narcomenudeo, Ferrari respondió: «Era una necesidad votar la ley». Según Ferrari, «la sociedad pedía a gritos que se actuara contra el flagelo de la droga» y que «el tema no pasa por votar la ley, sino que esta ley pueda cumplir los efectos para los cuales fue dictada». «Cuando votamos la ley de Narcomenudeo, que se tenía que estar trabajando paralelamente en una cárcel modelo, equidistante de ambas costas, donde se pueda de una manera dar la solución a este tema. No sólo para que los presos terminen amontonados, durmiendo como duermen ahora en las capillas y en las cocinas. Para que se los trate como corresponde, porque si ya cometieron el delito y están pagando por ese delito, que se cumpla con lo que dice la Constitución que las cárceles deben ser para resocializar al reo y no para castigo», aseguró.
Ante la repregunta, sobre los motivos de aprobar una ley ante una estructura que no estaba preparada para alojar a los detenidos que semana tras semana se están efectuando desde la aplicación de la norma, Ferrari expresó: «Urgente la provincia de Entre Ríos tiene que construir un edificio modelo donde se pueda dar cabida a toda esta problemática. Siempre vamos a estar en problemas, esto debió haberse comenzado a trabajar seriamente, pero bueno primero se hizo la ley y ahora nos encontramos con el problema. Sabíamos que puede producirse, esperamos que el gobierno provincial comience a trabajar en un edificio que permita alojar a todos los presos. Se hizo la ley pero no nos dimos cuenta de que previamente o paralelamente se tenía que estar construyendo las cárceles para que la gente pudiera ser alojada allí», explicó.
En cuanto al hecho ocurrido en Victoria y el pedido de informes a Romero, Ferrari lamentó: «Días antes el jefe del Servicio Penitenciario había estado en Victoria y había dicho que estaba todo en orden y a las 48 horas se produce esta masacre, lo que demuestra que todo en orden no estaba».
«Lo que llama la atención es que no se haya detectado este aparente enfrentamiento entre los internos, porque esto no fue algo espontáneo. Yo conozco el servicio penitenciario y no es tan así, si ha habido un guardiacárcel a cien metros esto nos demuestra más que los controles no han funcionado. En la forma en que se ha producido el hecho, llama enormemente la atención. Más si hubo un antecedente como el motín donde se trataron de realizar mejoras para prevenir. Que no haya sido detectado este malestar que existía entre los internos, me llama la atención», expresó.
