El temporal de lluvia y viento que afectó al Área Metropolitana con ráfagas de más de 100 kilómetros por hora generó problemas en el suministro eléctrico.
A las 7:40, alrededor de 250 mil usuarios de Edenor y de Edesur no tenían luz como consecuencias del destrozo provocado por la tormenta.
Según informó el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE), en el área de concesión de Edenor (norte) hay 151.044 usuarios sin suministro.
En el caso de Edesur, hay 99.705 hogares sin servicio.
Durante la madrugada de este martes se desató una fuerte tormenta sobre el Área Metropolitana de Buenos Aires que incluyó lluvias severas y fuertes ráfagas de viento que provocaron la caída de cables y árboles -algunos troncos aplastaron autos estacionados-, voladura de techos y cortes masivos de luz.
Asimismo, varios ramales de los trenes metropolitanos sufren demoras y cancelaciones, mientras que muchos aviones que debían aterrizar en el Aeroparque Jorge Newbery debieron ser desviados a otros aeropuertos cercanos.
Desde bien temprano, usuarios de distintas redes sociales comenzaron a compartir imágenes de las consecuencias que dejó el temporal. Entre ellas, se destaca la caída de un árbol sobre la avenida Álvarez Thomas, entre avenida Elcano y 14 de julio, en el barrio porteño de Villa Ortuzar. A la vuelta, además, se desprendió un cable del tendido eléctrico.
Ante este escenario, la Policía de la Ciudad dispuso un operativo de seguridad para resguardar la zona, y el tránsito proveniente desde Palermo era desviado en contramano por avenida Elcano.
Por su parte, otro árbol aplastó un auto estacionado sobre la calle San José de Calasanz al 400, a metros del cruce con la avenida Juan Bautista Alberdi, en el barrio de Caballito.
Una situación similar ocurrió en la estación Haedo del tren Sarmiento, donde un árbol de gran porte cayó sobre las vías y el servicio permaneció interrumpido durante varios minutos.
Producto del temporal, algunos aviones que debían aterrizar en el Aeroparque Jorge Newbery tuvieron que ser desviados a otras terminales aeroportuarias, como por ejemplo la de Mar del Plata.
Viviana, una vecina de Carapachay, en el partido bonaerense de Vicente López, contó en diálogo con el canal de noticias TN que el techo del vecino se incrustó en la planta alta de su casa. “Escuchamos una explosión que no sabíamos de dónde venía”, aseguró.
La feroz tormenta también afectó a la red eléctrica de Buenos Aires, donde pasadas las 7.30 de la mañana eran más de 250 mil los hogares sin luz.
Este martes comenzó un período de inestabilidad climática, que contará con tormentas de variada intensidad en CABA y el conurbano bonaerense. Las lluvias comenzaron en la mañana, pero el pico de mayor intensidad se registrará por la tarde, cuando tormentas fuertes afectarán la zona con precipitación abundante, ráfagas de viento y posible caída de granizo.
Minutos antes de las 6, el SMN emitió una alerta amarilla para la región metropolitana, que implica la posibilidad de tormentas con acumulados de entre 20 y 45 mm, aunque en algunos sectores los valores podrían ser más elevados. La advertencia se mantendrá vigente también para el miércoles 12 de febrero, cuando se esperan nuevos episodios de lluvias y chaparrones.
Tormentas más intensas y un descenso de temperatura
Además de la extensión del período de lluvias, el último informe meteorológico del SMN advierte sobre un significativo descenso de la temperatura. Luego de que ayer lunes se registrara una temperatura máxima de 38,5 °C en la Ciudad de Buenos Aires, para este martes se espera una máxima de 26 °C, con una mínima de 21 °C. Estas condiciones se mantendrían durante el miércoles, en tanto que las temperaturas no superarán los 28 °C en lo que resta de la semana.
La previsión indica que las tormentas más fuertes se registrarán después de las 14 horas del martes, momento en que se intensificará la alerta del SMN. Según el portal especializado Meteored, las lluvias comenzarán en horas de la mañana, alrededor de las 8, con progresivo aumento en la intensidad hacia la tarde.
El cambio en el pronóstico no solo afecta a Buenos Aires, sino que también se extiende a diversas regiones del país. En el norte argentino, donde las temperaturas han superado los 44 °C en provincias como Santiago del Estero, se espera un alivio paulatino con la llegada de un frente frío desde la Patagonia. Sin embargo, el descenso de temperatura será más progresivo y no tan abrupto como en Buenos Aires.
En la ciudad de Mar del Plata, la jornada del lunes fue histórica, con un registro de 39 °C, la temperatura más alta en febrero de los últimos 65 años. Se prevé que este frente frío también genere tormentas en la costa bonaerense en los próximos días, lo que contribuirá a una reducción en las temperaturas extremas.
Por otro lado, en la Patagonia, el fenómeno climático traerá no solo lluvias, sino también vientos fuertes con ráfagas que podrían alcanzar los 90 km/h en algunas zonas. Estas condiciones podrían generar complicaciones en el tránsito y actividades al aire libre.
Recomendaciones ante el pronóstico actualizado
Ante la persistencia de lluvias y tormentas, el Servicio Meteorológico Nacional recomienda tomar precauciones. Entre las principales medidas a considerar están:
Evitar la exposición en zonas con anegamientos o acumulación de agua.
Prestar atención a las actualizaciones del pronóstico y advertencias oficiales.
Asegurar objetos que puedan ser desplazados por fuertes ráfagas de viento.
En caso de actividad eléctrica intensa, permanecer en lugares cerrados y evitar el uso de dispositivos electrónicos conectados a la red eléctrica.
El cambio en el pronóstico refuerza la importancia de seguir la información actualizada de fuentes oficiales para evitar riesgos innecesarios. El SMN continuará monitoreando la situación y brindando detalles sobre la evolución del clima en los próximos días.
Fuente: Infobae