El gran apagón que afectó desde la madrugada de este miércoles a la Ciudad de Buenos Aires y a algunos barrios del conurbano bonaerense volvió a repetirse, aunque por otras causas, al mediodía, con semáforos apagados, cancelaciones en el servicio del subte, embotellamientos y demoras en las principales avenidas porteñas.
Según información oficial, a la mañana hubo 550.000 usuarios sin suministro. El apagón del mediodía tuvo impacto en 622.000 usuarios, aunque a las 15 comenzó a resolverse el problema y quedaban 366.000 afectados.
Otra vez, las líneas B, D y E del subte porteño interrumpieron su servicio, mientras que las C y H normalizaron rápidamente sus recorridos. También había demoras en la línea Roca, en el ramal a La Plata. Otra vez, la avenida Corrientes desde Chacarita y hasta el centro, se quedó sin semáforos, con lo que volvieron a generarse problemas de tránsito.
Cerca de las 13, con 44 grados de sensación térmica, la Ciudad se volvió intransitable y todavía no se advertía la presencia de agentes de tránsito para ordenar las esquinas con autos y colectivos trabados. El Obelisco se convirtió en una zona de caos. «Pocas veces vi algo así, todos los semáforos apagados, imposible circular. Me sorprendió que, de punta a punta de la 9 de Julio, no vi ni una moto ni un agente de tránsito», dijo Mario Gerlo, que viaja desde su hogar en Boulgne hasta Barracas, para ir a su trabajo y atraviesa toda la avenida desde la Illia hasta la avenida San Juan.
La causa del nuevo apagón fue un desperfecto de las 12.08 que se profundizó a las 12.28. «Informamos que se produjo una falla en una línea de alta tensión que afecta a varias de nuestras subestaciones. Nuestros técnicos se encuentran trabajando para reestablecer el servicio», dijeron fuentes de Edesur. «Una vez que se restablezca Dock Sud recuperaremos servicio», agregaron.
«El corte que está ocurriendo en este momento obedece a una falla en dos líneas de alta tensión de 220 KV de Costanera-Hudson, propios del sistema de distribución de la empresa Edesur. Afecta el sur del GBA y sur de la Ciudad. Hay 800 MW de corte de servicio y 2.500 MW de generación fuera de servicio. No hay inconvenientes para atender con normalidad el resto del Sistema Argentino de Interconexión (SADI)», dijeron fuentes de la Secretaría de Energía de la Nación, y aseguraron que «se está investigando para proceder conforme al marco regulatorio en lo que a multas y sanciones se refiere».
La 9 de Julio colapsada por el corte de luz. Foto: Juano TesoneLa 9 de Julio colapsada por el corte de luz. Foto: Juano Tesone
«Aunque cerca de las 8 ya se había solucionado el primer apagón, las líneas de alta tensión de Edesur siguieron con problemas. A las 11.07, la línea Hudson-Costanera 1 se desenganchó del sistema, aunque sin afectación al servicio. Una hora más tarde hubo un corte en la línea Hudson-Costanera 2; y la línea 1 se volvió a desenganchar a las 12.37, que se repuso a las 12.55 y volvió a caer, por tercera vez, a las 13.10», dijeron fuentes del sector. Y agregaron: «La sumatoria de fallas provocó un efecto «arrastre» sobre máquinas de generación de energía que no pudieron conectarse al sistema eléctrico nacional para atender la demanda que en ese momento estaba sin servicio».
Como a la mañana, también el subte volvió a sufrir los cortes. Desde Emova, la empresa operadora, dijeron que «el servicio de todas las líneas de subte se está prestando desde las primeras horas de la mañana con interrupciones y alteraciones debido a la inestabilidad del servicio que provee el distribuidor externo de energía eléctrica».
La salida de servicios de los semáforos sorprendió a los automovilistas Desde el Gobierno porteño informaron, minutos después de las 14, que «la Ciudad desplegó un operativo especial con agentes de tránsito y seguridad, y asistencia en los puntos críticos por el nuevo apagón en el Centro y Sur porteño, en barrios como La Boca, Barracas, o la zona de Plaza de Mayo».
Y agregaron que, debido a las fallas del suministro eléctrico «más de 50 semáforos dejaron de funcionar de las más de 4.000 intersecciones semaforizadas. Actualmente, cuentan con el apoyo del Cuerpo de Agentes quienes están ordenando las intersecciones. Están trabajando 300 agentes de tránsito».
Madrugada difícil
En el comienzo de un día en el que la sensación térmica superó llegó a 44.4°, miles de usuarios de diferentes sectores de la Capital y del sur del Gran Buenos Aires reportaron falta de luz desde la madrugada y por alrededor de tres horas. Los barrios afectados eran los de Almagro, Caballito, La Paternal, Villa Urquiza, Balvanera, Boedo, Parque Patricios, Constitución y San Telmo, entre otros.
Los subtes y los semáforos sufrieron interrupciones por el corte de luz que afectó a 550.000 usuarios. Foto: Maxi FaillaLos subtes y los semáforos sufrieron interrupciones por el corte de luz que afectó a 550.000 usuarios. Foto: Maxi Failla
En el ámbito del conurbano, se reportaron también problemas en Lanús, Lomas de Zamora, Wilde, Quilmes, La Plata, San Fernando y Avellaneda.
Según información oficial de la empresa Edesur, «a las 5.50. por una falla salieron de servicio dos líneas de 220 KV, generando pérdida de generación (alrededor de 2.200 MW) en las centrales Costanera, Dock Sud y Ensenada de Barragán, y cortes a la demanda por aproximadamente 750 MW».
Además, se informó que afectó a unos «550.000 usuarios de Edesur y también a parte de la demanda de Edelap (empresa distribuidora de La Plata). Minutos después de las 9, fuentes de la compañía informaron que la demanda estaba «normalizada».
Escuelas y problemas en el subte
El inconveniente de la mañana afectó también el normal dictado de clases, ya que algunas escuelas porteñas y otras de la provincia de Buenos Aires (se arrancaba hoy) presentaron falta de luz, por lo que varios padres decidieron no mandar a sus hijos. En San Cristóbal, por ejemplo, una institución avisaba que tenían agua y que iban a dar clases, aunque dejaban a criterio de los padres la decisión de dejar a sus hijos o no hacerlo.
En la comisaria vecinal 1-c, en la avenida San Juan, se reforzó la seguridad por el apagón. Foto: Maxi FaillaEn la comisaria vecinal 1-c, en la avenida San Juan, se reforzó la seguridad por el apagón. Foto: Maxi Failla
Sin embargo, según fuentes oficiales, tanto en la Ciudad como en Provincia, dijeron que, como el servicio se recuperó antes de las 9, finalmente fueron pocas las instituciones, tanto privadas como estatales, que no pudieron dar clases.
En medio del colapso, a primera hora del día, no funcionó durante varios minutos la línea B del subte porteño y la A estuvo limitada entre las estaciones San Pedrito y Río de Janeiro. Aunque minutos después de las 7 el servicio se había normalizado por completo. La E no se detuvo en la estación Urquiza, y alrededor de las 9, el servicio se detuvo por completo por fallas técnicas. Aunque luego se reinició.
Además de los subtes, estuvieron afectados el Ferrocarril Mitre Tigre, justo cuando volvió a funcionar tras diez días parado por obras, aunque ya normalizó su recorrido. También el Roca, en los ramales La Plata y Bosques vía Quilmes, registraba demoras.
En San Juan y Entre Ríos, en tanto, se reforzó la seguridad ya que no había luz en la Comisaría Vecinal 1-C y en la zona debido al corte general de suministro eléctrico. Fuentes oficiales le confirmaron a Clarín que no hubo ningún intento de fuga. Se trató de una medida preventiva.
Jésica (37), una vecina de San Cristóbal, salió a dejar a su hija en la escuela y recalcó la necesidad de aumentar las medidas de seguridad. Aun recuerda la fuga de la Comisaria 3-B, también en el barrio, en la que un helicóptero sobrevoló la zona en busca de los evadidos.
«Trabajo en Barracas y vivo en Caballito. En el camino me econtré varios semáforos sin funcionar sobre la avenida San Juan y después también en Pavón», dijo Elías.
Otros automovilistas reportaron también que durante la mañana también hubo problemas con los semáforos de calles y avenidas de la Ciudad, que salieron de servicio y quedaron titilando o apagados hasta que se restableció el suministro eléctrico. Por ejemplo la traza de la avenida Brasil tenía los semáforos apagados en los cruces con Jujuy y Pichincha, a la altura del hospital Garrahan. La misma escena se repetía en otras avenidas como San Juan, Independencia y Belgrano.
