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Conflictos: Musk expande su inteligencia artificial Grok en el gobierno de Estados Unidos

 

 

(Reuters) – El equipo DOGE del multimillonario Elon Musk está ampliando el uso de su chatbot de inteligencia artificial Grok en el gobierno federal de Estados Unidos para analizar datos, dijeron tres personas familiarizadas con el asunto, lo que podría violar las leyes de conflicto de intereses y poner en riesgo información confidencial de millones de estadounidenses.


Este uso de Grok podría reforzar las preocupaciones de los defensores de la privacidad y otros de que el equipo del Departamento de Eficiencia Gubernamental de Musk parece estar dejando de lado las protecciones establecidas desde hace tiempo sobre el manejo de datos sensibles mientras el Presidente Donald Trump sacude la burocracia estadounidense.

Una de las tres personas familiarizadas con el asunto, con conocimiento de las actividades de DOGE, afirmó que el equipo de Musk utilizaba una versión personalizada del chatbot Grok. El objetivo aparente era que DOGE analizara los datos de forma más eficiente, según esta persona. «Hacen preguntas, preparan informes y ofrecen análisis de datos».

La segunda y la tercera persona dijeron que el personal de DOGE también les dijo a los funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional que lo usaran aunque Grok no había sido aprobado dentro del departamento.

Reuters no pudo determinar los datos específicos que se incorporaron a la herramienta de IA generativa ni cómo se configuró el sistema personalizado. Grok fue desarrollado por xAI, una empresa tecnológica que Musk lanzó en 2023 en su plataforma de redes sociales, X.

Si los datos fueran información gubernamental sensible o confidencial, el acuerdo podría violar las leyes de seguridad y privacidad, dijeron cinco especialistas en tecnología y ética gubernamental.

También podría brindar al director ejecutivo de Tesla y SpaceX acceso a valiosos datos no públicos de contratación federal en agencias con las que colabora de forma privada, o utilizarse para capacitar a Grok, un proceso en el que los modelos de IA analizan grandes cantidades de datos, según los expertos. Musk también podría obtener una ventaja competitiva injusta sobre otros proveedores de servicios de IA al usar Grok en el gobierno federal, añadieron.

Musk, la Casa Blanca y xAI no respondieron a las solicitudes de comentarios. Un portavoz de Seguridad Nacional negó que DOGE hubiera presionado al personal del DHS para usar Grok. «DOGE no ha presionado a ningún empleado para que use herramientas o productos en particular», declaró el portavoz, quien no respondió a más preguntas. «DOGE está aquí para detectar y combatir el despilfarro, el fraude y el abuso».

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xAI de Musk, una empresa emergente en la industria en comparación con sus rivales OpenAI y Anthropic, afirma en su sitio web que podría monitorear a los usuarios de Grok para «fines comerciales específicos». «El conocimiento de la IA debe ser integral y de gran alcance», afirma el sitio web.

Como parte del esfuerzo declarado de Musk por eliminar el despilfarro y la ineficiencia del gobierno, el multimillonario y su equipo de DOGE han accedido a bases de datos federales altamente protegidas que almacenan información personal de millones de estadounidenses. Los expertos afirman que estos datos suelen estar fuera del alcance de casi todos los funcionarios, salvo unos pocos, debido al riesgo de que se vendan, se pierdan, se filtren, violen la privacidad de los estadounidenses o expongan al país a amenazas de seguridad.

Normalmente, el intercambio de datos dentro del gobierno federal requiere la autorización de la agencia y la participación de especialistas gubernamentales para garantizar el cumplimiento de las leyes de privacidad, confidencialidad y otras leyes.

Analizar datos federales sensibles con Grok marcaría un cambio importante en el trabajo de DOGE, un equipo de ingenieros de software y otros vinculados a Musk. Han supervisado el despido de miles de empleados federales, han tomado el control de sistemas de datos sensibles y han intentado desmantelar agencias con el presunto argumento de combatir el despilfarro, el fraude y el abuso.

“Dada la magnitud de los datos que DOGE ha acumulado y las numerosas preocupaciones que genera trasladar esos datos a software como Grok, para mí esto representa una amenaza a la privacidad de lo más grave que se puede imaginar”, afirmó Albert Fox Cahn, director ejecutivo del Surveillance Technology Oversight Project, una organización sin fines de lucro que defiende la privacidad.

Sus preocupaciones incluyen el riesgo de que los datos del gobierno se filtren a xAI, una empresa privada, y la falta de claridad sobre quién tiene acceso a esta versión personalizada de Grok.

El acceso de DOGE a información federal podría dar a Grok y xAI una ventaja sobre otros posibles contratistas de IA que buscan prestar servicios gubernamentales, afirmó Cary Coglianese, experto en regulaciones federales y ética de la Universidad de Pensilvania. «La empresa tiene un interés financiero en insistir en que su producto sea utilizado por empleados federales», afirmó.

“APARIENCIA DE INTERÉS”

Además de usar Grok para su propio análisis de datos gubernamentales, el personal de DOGE les indicó a los funcionarios del DHS durante los últimos dos meses que usaran Grok, aunque no había sido aprobado para su uso en la extensa agencia, según la segunda y la tercera persona. El DHS supervisa la seguridad fronteriza, la aplicación de la ley migratoria, la ciberseguridad y otras funciones sensibles de seguridad nacional.

Si a los empleados federales se les da oficialmente acceso a Grok para tal uso, el gobierno federal tiene que pagar a la organización de Musk por el acceso, dijeron las personas.

“Estaban impulsando que se utilizara en todo el departamento”, dijo una de las personas.

Reuters no pudo determinar de forma independiente si se habría cobrado al gobierno federal por usar Grok, ni cuánto. Los periodistas tampoco pudieron determinar si los empleados del DHS siguieron la directiva del personal de DOGE de usar Grok o ignoraron la solicitud.

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS), bajo la anterior administración de Biden, creó políticas el año pasado que permiten a su personal utilizar plataformas de IA específicas, como ChatGPT de OpenAI, el chatbot Claude desarrollado por Anthropic y otra herramienta de IA desarrollada por Grammarly. El DHS también creó un chatbot interno.

El objetivo era convertir al DHS en una de las primeras agencias federales en adoptar la tecnología y utilizar IA generativa, capaz de redactar informes de investigación y realizar otras tareas complejas en respuesta a indicaciones. Según esta política, el personal podría usar los bots comerciales para datos no sensibles ni confidenciales, mientras que el bot interno del DHS podría recibir datos más sensibles, según consta en los registros publicados en el sitio web del DHS.

En mayo, funcionarios del DHS cerraron abruptamente el acceso de los empleados a todas las herramientas comerciales de inteligencia artificial, incluyendo ChatGPT, tras sospecharse que los trabajadores las usaban indebidamente con datos confidenciales, según la segunda y la tercera fuente. En cambio, el personal aún puede usar la herramienta interna de inteligencia artificial del DHS. Reuters no pudo determinar si esto impidió que DOGE ascendiera a Grok en el DHS.

El DHS no respondió preguntas sobre el asunto.

Musk, la persona más rica del mundo, anunció a los inversores el mes pasado que reduciría su tiempo en DOGE a uno o dos días a la semana a partir de mayo. Como empleado especial del gobierno, solo puede servir durante 130 días. Se desconoce cuándo termina ese periodo. Si reduce su jornada a tiempo parcial, podría extender su mandato más allá de mayo. Sin embargo, ha afirmado que su equipo de DOGE continuará con su trabajo mientras él termina su mandato en la Casa Blanca.

Si Musk estuvo directamente involucrado en las decisiones de usar Grok, podría violar un estatuto de conflicto de intereses criminal que prohíbe a los funcionarios, incluidos los empleados especiales del gobierno, participar en asuntos que podrían beneficiarlos financieramente, dijo Richard Painter, asesor ético del ex presidente republicano George W. Bush y profesor de la Universidad de Minnesota.

“Esto da la impresión de que DOGE está presionando a las agencias para que usen software para enriquecer a Musk y xAI, y no para el beneficio del pueblo estadounidense”, declaró Painter. Esta ley rara vez se procesa, pero puede conllevar multas o penas de prisión.

Si el personal de DOGE impulsara el uso de Grok sin la participación de Musk, por ejemplo, para congraciarse con el multimillonario, sería éticamente problemático, pero no una violación de la ley de conflicto de intereses, dijo Painter. «No podemos procesarlo, pero sería responsabilidad de la Casa Blanca prevenirlo. Da la impresión de que se trata de un negocio en beneficio propio».

El impulso para usar Grok coincide con una iniciativa más amplia de DOGE, liderada por dos miembros del equipo de Musk, Kyle Schutt y Edward Coristine, para usar IA en la burocracia federal, según informaron otras dos personas familiarizadas con las operaciones de DOGE. Coristine, de 19 años y conocido en línea como «Big Balls», es uno de los miembros más destacados de DOGE.

Schutt y Coristine no respondieron a las solicitudes de comentarios.

El personal de DOGE ha intentado acceder a los correos electrónicos de los empleados del DHS en los últimos meses y ha ordenado al personal que capacite a la IA para identificar las comunicaciones que sugieran que un empleado no es «leal» a la agenda política de Trump, según las dos fuentes. Reuters no pudo determinar si Grok se utilizó para dicha vigilancia.

En las últimas semanas, un supervisor le dijo a un grupo de aproximadamente una docena de trabajadores de una agencia del Departamento de Defensa que una herramienta algorítmica estaba monitoreando parte de su actividad informática, según otras dos personas informadas sobre las conversaciones.

Reuters también revisó dos intercambios de mensajes de texto separados entre personas directamente involucradas en las conversaciones. Las fuentes pidieron que no se revelara el nombre de la agencia específica por temor a posibles represalias. Desconocían qué herramienta se estaba utilizando.

El uso de IA para identificar las creencias políticas personales de los empleados podría violar las leyes del servicio civil destinadas a proteger a los funcionarios de carrera de la interferencia política, dijo Coglianese, el experto en regulaciones federales y ética de la Universidad de Pensilvania.

En una declaración a Reuters, el Departamento de Defensa afirmó que su equipo DOGE no había participado en ningún monitoreo de red ni había recibido instrucciones para usar herramientas de IA, incluyendo Grok. «Es importante destacar que todas las computadoras del gobierno están sujetas a monitoreo como parte del acuerdo de usuario estándar», declaró Kingsley Wilson, portavoz del Pentágono.

El departamento no respondió a preguntas de seguimiento sobre si se habían implementado recientemente nuevos sistemas de monitoreo.

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