Tras la extensa audiencia inicial del juicio a los 18 policías acusados de sedición por los acontecimientos de diciembre de 2013, el abogado defensor Oscar Bacigaluppe sostuvo: “Quedamos asombrados en que sigan insistiendo con la instigación al robo calamitoso que ya fue desestimado por el juez de garantías; hay argumentos de sobra e insisten”.
Entretanto, la defensa analiza si algunos de sus defendidos declaran el miércoles o, en cambio, esperan la declaración de los primeros testigos, que según cree, serán integrantes de la anterior cúpula policial de Concordia. Dijo el abogado que según trascendió en tribunales el primer testigo podría ser el entonces Jefe de Policía Lucio Villalba.
Piensa, asimismo, que en el medio del conflicto quedaron “funcionarios policiales sumariados que tendrían que declarar cómo ocurrieron realmente los hechos”. No obstante, “son funcionarios que están en una situación más que apremiante porque si declaran realmente como fueron los hechos no sabemos si pueden tener o no consecuencias y si mienten estaría bien que tengan consecuencias. El drama es que no sabemos hasta qué punto ese sumario que tienen sobre sus cabezas no va a servir como una excusa para referirse a los hechos realmente cómo sucedieron. Pero son hechos claros y concretos que hacen a la acusación principal: la sedición”.
“Hay hechos puntuales que hacen al tipo penal de la sedición que no están ni invocados por la acusación, como ser la orden del cese de la supuesta sedición. Nunca, nunca, ni el gobernador, ni los ministros tomaron la ocurrencia de los hechos como un acto de sedición, los tomaron como un mero reclamo salarial”, completó.
Objetó, asimismo, la hipótesis que sostiene fiscalía en cuanto al presunto delito de sedición. “Para que la sedición se tipifique necesita que se den ciertos recaudos. Yo creo que con pocas declaraciones el tema de la sedición va a quedar bastante aclarado. Si confiamos en el tribunal creemos sinceramente que los pasos para que se configure la sedición no se han dado. Quienes estuvieron presentes esos días ninguno estimó que ahí había una sedición. Si -como dicen- la jefatura estaba tomada, el marco jurídico dentro de la fuerza policial indica que los comandos se deben trasladar a una comisaría o a otro lugar. Acá nada de eso ocurrió. El día lunes el gobernador estaba reunido con los “sediciosos” charlando amablemente. Si a mí hoy me extorsionan mañana no me voy a juntar con el extorsionador a departir amablemente”.
Cree que la causa “se va purificar mucho con las primeras declaraciones. Vamos a circunscribir la etapa de interrogatorios de los testigos con preguntas muy concretas”. En ese sentido, Bacigaluppe considera que los testimonios clave serán los que brinden los funcionarios que cubrían, por aquellos días, cargos de mando dentro de Jefatura.
El interés del defensor se centra también en la declaración de testigos como el intendente, el obispo, el gobernador y los ministros. Sin embargo, están exceptuados de concurrir por el Código Procesal Penal. “Pueden contestar por escrito y no concurrir a la audiencia, pero las normas internacionales que tienen supremacía constitucional al código dicen que nadie puede ser condenado sin que tenga la posibilidad de interrogar libremente por sí o por apoderado a todos los testigos, sin distinción; no dan privilegios a nadie. Por las convenciones internacionales los funcionarios políticos están obligados a sentarse y declarar”, lanzó.
También le llamó la atención “palabras dichas por la procuradora que vino de Paraná. Se hizo una selección y se acusó a esos seleccionados. Ahora, por qué se los seleccionó no dijo, cuál fue el criterio de selección, quién los seleccionó no se dijo”.
