TEGUCIGALPA, (Reuters) – Salvador Nasralla, del centrista Partido Liberal, tomó el martes una estrecha ventaja en las elecciones presidenciales de Honduras sobre Nasry Asfura, el candidato conservador respaldado por el presidente estadounidense Donald Trump, en un recuento de votos plagado de retrasos y fallas del sistema.
Los últimos resultados, publicados por la autoridad electoral alrededor de las 14:30 hora local, mostraban a Nasralla con el 39,96% y a Asfura, del Partido Nacional, con el 39,80%, con poco más del 60% de los votos escrutados. Rixi Moncada, del gobernante Partido LIBRE, de izquierda, se situaba muy por detrás, en tercer lugar, con el 19,19%. Asfura llevaba una ventaja de unos 500 votos cuando se publicaron los resultados el lunes.
Más temprano el martes, la autoridad electoral de Honduras pidió calma mientras luchaba por superar una falla del sistema que dejó alrededor del 20% de los votos en las elecciones presidenciales sin contar, mientras Trump lanzaba acusaciones de posible fraude y juramentaba que «habrá un infierno que pagar» si se alteran los resultados.
El lunes, el organismo electoral dijo que Asfura y Nasralla estaban en un «empate técnico» y que cada uno tenía poco menos del 40% de los votos, y que los votos tendrían que contarse a mano.
El sistema inicial de conteo rápido se vio afectado por problemas, según informó la autoridad electoral del CNE en un comunicado el martes. Esto también provocó problemas con el portal web donde se suponía que los resultados se actualizaban en tiempo real. El sitio web estuvo inactivo gran parte del lunes, lo que aumentó la tensión en la reñida contienda, plagada de acusaciones de posible fraude incluso antes de que se emitieran los votos el domingo.
Mientras continúa el recuento, el expresidente hondureño Juan Orlando Hernández, del Partido Nacional, fue liberado el lunes de una prisión estadounidense, donde cumplía una condena de 45 años de prisión por tráfico de drogas y cargos de armas de fuego, mostró un registro de la Oficina Federal de Prisiones.
Su liberación se produjo después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, instara a los votantes hondureños a votar por el candidato del Partido Nacional, Asfura, y anunciara que indultaría a Hernández . Un funcionario de la Casa Blanca confirmó el martes que Trump había indultado a Hernández.
Trump intervino el lunes en una publicación en las redes sociales en la que afirmó, sin pruebas, que Honduras estaba «tratando de cambiar los resultados de sus elecciones presidenciales».
«Si lo hacen, ¡se desatará un infierno! El pueblo de Honduras votó masivamente el 30 de noviembre», dijo Trump en su plataforma Truth Social.
Hubo una alta participación electoral en las elecciones del domingo, que transcurrieron pacíficamente en todo el país, según la Organización de los Estados Americanos (OEA), que observó la votación. En un comunicado el lunes, indicó que «pudo verificar que la votación se desarrolló con normalidad, salvo incidentes aislados en algunos municipios del país».
Pero existe la preocupación de que si el recuento de votos se prolonga, el clima electoral altamente tenso podría conducir a protestas y posible violencia.
La autoridad electoral dijo que ahora divulgaría información sobre el recuento directamente a los medios y partidos políticos para garantizar que el público pudiera seguir los resultados.
El expresidente Manuel Zelaya, esposo de la actual presidenta Xiomara Castro, criticó duramente la interferencia de Trump en las elecciones, afirmando en X que se trataba de un intento de frenar la candidatura de Moncada y prometiendo que el pueblo hondureño defendería la democracia.
«Los que luchamos por la libertad estamos de pie», escribió. «Somos patriotas y nadie se rinde».
El lunes por la noche, Moncada afirmó que las elecciones «aún no estaban perdidas» y alegó que los demás partidos habían manipulado el proceso. También denunció la injerencia estadounidense en las elecciones.
En la previa, Trump intervino en la reñida contienda electoral para apoyar a Asfura, exalcalde de Tegucigalpa de 67 años, en una serie de publicaciones en redes sociales, afirmando que podría colaborar con él para combatir el narcotráfico. Acusó a Moncada de ser «comunista», sin aportar pruebas.