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El Comisario Mario Nuñez, acusado de narco, dice ser victima de una interna policial

El Comisario inspector de la Policía de Entre Ríos no se quedó callado, como muchos pensaban que iba a hacer. En la indagatoria en el Juzgado federal de Concepción del Uruguay, Mario Núñez declaró y respondió todas las preguntas del juez y la fiscal, a quienes aseguró que no tiene nada que ver con la banda narco liderada por Mario González, y que lo detuvieron por una interna policial. La defensa asegura que no hay ni una sola prueba que lo incrimine en la banda narco, y que la acusación contra el oficial con 26 años de trayectoria en la fuerza provincial “es una vergüenza”.

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Luego de los múltiples procedimientos simultáneos que comenzaron en la noche del martes en Paraná, Concordia, Concepción del Uruguay, Colón y Capital Federal, se produjeron nuevas detenciones y finalmente quedaron arrestadas nueve personas imputadas en la causa que tramita el juez federal Pablo Seró, quien investiga una banda dedicada a la venta de cocaína.

Entre los detenidos están Núñez, quien se desempeñaba como jefe de Operaciones de la Dirección Toxicología de la Policía provincial, así como otros tres funcionarios: José María Gómez y Sergio García, integrantes de la subdelegacía Concordia de la Policía Federal, y Carlos Acosta, del Escuadrón IV de Gendarmería Nacional de Concordia.

Además, quedaron presos el mencionado González, quien estaba prófugo desde 2008 acusado de manejar una cocina de cocaína, y otras cuatro personas que tendrían otros roles en la organización delictiva.

Todos ellos fueron citados a la declaración indagatoria, y por el escándalo que fue su detención en la propia sede de Toxicología de la capital provincial, se esperaba con ansias la actitud procesal de Núñez.

Desde la Policía lo habían calificado como “delincuente”, y afirmaron que una investigación interna derivó en la detención y apartamiento del cargo.

El abogado defensor del comisario, Rafael Briceño, habló respecto de la declaración de Núñez: “No hay nada, con mayúscula y subrayado. Nada lo involucra con ninguna situación ilícita. Esto se va a ir aclarando seguramente con el tiempo, pero tenemos entendido que es una cuestión interna de la Policía, más precisamente de la propia sección en la cual él estaba trabajando, la Dirección Toxicología”.

En este sentido, el abogado aseguró: “Con todas las letras esto es una vergüenza. Yo hace 38 años que ejerzo el Derecho Penal y a lo mejor alguna vez me tocó asistir a algún imputado con alguna situación similar, pero acá no hay ninguna evidencia, ni la más mínima, hasta el momento, de que Núñez haya cometido algún ilícito. Ni objetiva ni subjetiva”.

Lo que trascendió de la investigación que involucraría a Núñez en la causa por tráfico de drogas, es que de las escuchas telefónicas se desprende su relación con la banda narco. Sin embargo, el defensor aclaró que se trata de solo dos llamadas telefónicas que recibió el comisario a su teléfono oficial (el que le da la Policía para trabajar), de parte de un “datero”, es decir de alguien que le pasó información, la cual fue puesta luego en conocimiento de las autoridades respectivas para ser investigada.

“La única prueba que se pretende hacer valer en su contra son dos escuchas de las cuales no surge ningún ilícito. Al contrario, son escuchas en las cuales se lo llama al celular oficial, ni siquiera estamos hablando de celulares truchos ni personales del imputado, brindando datos concretos de movimientos. Lo llamó una persona en dos oportunidades, que no se identificó. Le dio información relativa a que tal o cual persona operaba en tal o cual lugar o que desarrollaba tal actividad. Datos que a través del mismo celular está la constancia de que Núñez los remitió al responsable de esa localidad y de esa área para que los corrobore o descarte, algo que es totalmente lícito y legal. Es la forma que normalmente trabajó siempre la Policía y la cual se hizo a cambio de nada, ni se prometió nada”, dijo Briceño.

Acerca de la indagatoria, en la cual le dan a conocer la imputación al acusado, el defensor contó: “La lectura de los cargos, si no fuera una situación tan difícil para Núñez, sería para reírse. Le asiste un carácter de tragicómico, y la imputación está mal redactada. Es más, se le atribuye la conformación de una asociación ilícita y no hay ni la más mínima evidencia de que se los hubiera encontrado en tal lugar, o que era planificado con una, dos, cinco o 20 personas”, y agregó: “El relato fáctico es nulo, tiene que ser claro preciso y circunstanciado”. Por otro lado, Núñez no negó conocer a los otros funcionarios de las fuerzas federales detenidos, sino que dijo que los ubicaba por tantos años de trabajo de tareas de investigación en Concordia . Pero aseguró que desde hace mucho tiempo que no mantiene con ellos ningún contacto.

Briceño aseguró además que el comisario inspector detenido “es una persona impoluta, lo que no se puede decir de muchos policías que están en cargos directivos más altos que el suyo. En toda su carrera creo que tuvo una causa de la cual fue sobreseído (un policía que estaba a su cargo baleó de rebote a una persona), ni tiene sumarios administrativos. Pueden averiguar con la gente de la zona quién es Mario Núñez”.

Nadie se ha referido a si el acusado se ha enriquecido con la presunta colaboración con los narcos. Sobre este tema, el defensor afirmó que este mes va a terminar de pagar la última cuota de un Chevrolet Ágile, que es el auto más barato del mercado (antes tenía un Fiat Uno) y vive en una casa modesta de un barrio alejado del centro de Concordia”. Núñez y su defensor están a la espera de que se resuelva su situación procesal en los próximos días. “Ya declaró, y no tenemos pruebas que aportar porque no tenemos de qué defendernos”, dijo Briceño.

 

Indagados y alojados en unidades penales

El diagrama de la banda narco armado en la causa judicial, en base principalmente a las escuchas telefónicas, sindica a Mario González como el líder, quien contaba con la protección de los cuatro funcionarios de la Policía de Entre Ríos, la Federal y Gendarmería detenidos. En los procedimientos del martes a la noche quedaron detenidos otros tres presuntos integrantes de la organización delictiva. Dos de ellos fueron liberados al día siguiente, aunque seguían vinculados a la causa, pero luego al surgir nuevas pruebas se ordenó otro allanamiento y fueron arrestados.

A su vez, en otros procedimientos realizados el jueves en Concepción del Uruguay, quedaron detenidas otras dos personas, de 26 y 29 años. A todos el juez federal Pablo Seró les dictó la prisión preventiva, en distintas unidades penales de la provincia. González permanece alojado en la cárcel de Concordia, en tanto que Núñez, luego de un periplo por varios lugares de la provincia, quedó en una celda de la Unidad Penal N° 1 de Paraná.

 

 

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