La expectativa para la siembra de maíz en Entre Ríos volvió a caer ante la perspectiva de una mayor “sojización” dijo Rolf Müller, asesor CREA en el sur entrerriano. «Se sojiza bastante más este año», precisó.
La fecha óptima para sembrar maíz arrancó con buenas condiciones climáticas, pero falta expectativa. De manera aislada y con planes de siembra de baja superficie se estima una caída abrupta de la superficie para este momento del año.
Todos coinciden en que se deja pasar así una buena oportunidad para aprovechar las destacadas condiciones ambientales que hay actualmente. Sumado a esto también se espera una primavera de buenas precipitaciones, estas dos condiciones representan factores determinantes de altos rendimientos.
«Habrá un 30% menos de maíz de primera en esta zona», dijo Juan Petrelli a Clarín Rural, asesor de la zona de Venado Tuerto y responsable de una empresa de monitoreo de plagas. El técnico sostuvo que ya se largó la siembra del cultivo y que hay excelentes condiciones técnicas para la implantación, sin embargo se lamenta cuando reconoce que la intención de siembra es muy baja.
«Casi exclusivamente lo están sembrando aquellos que le dan un destino ganadero, feedlot o tambo. Conozco pocos casos que lo vayan vender como grano», anticipó.
Petrelli comentó que la mayoría de los productores se están inclinando a las siembras tardías, «habrá más tardío que temprano, más de lo que suponíamos», dijo y agregó que esta estrategia trae aparejada varios beneficios técnicos y financieros.
Reconoció además que muchos productores esperaron más tiempo para sembrar esperanzados en que el valor de la bolsa de semillas bajara su precio frente a la escasa demanda de mercado.
Federico Varela, asesor técnico y productor en la zona de Pergamino (norte de Buenos Aires) avaló con su propia experiencia lo que pasa con el maíz en la zona.
«Casi nada de maíz de primera», afirmó. Contó que todos los años hacen un gran porcentaje de primera fecha, sin embargo, este año mayormente su siembra será de segunda o tardía. «Detrás de una legumbre encontramos la mejor combinación agronómica y financiera para sembrar el cereal», define Varela.
Coincidió con Petrelli y comentó que los productores que se están animando a sembrar maíz de primera son lo que le agregan valor a través de la producción pecuaria. Respecto al manejo tecnológico, Varela anticipó que, «siempre lo hacemos con la mejor tecnología para acompañar la genética de punta que sembramos».
En la zona de Entre Ríos, Rolf Müller, reconocido asesor CREA en el sur entrerriano, pero que recorre toda la provincia, comentó que los campos del norte de Entre Ríos que tiene una parte ganadera, están sembrando maíz y sorgo pero, «solo para cubrir las necesidades para la ganadería. Se sojiza bastante más este año», afirmó.
Agregó que en el resto de la provincia, algunas empresas, con campos propios y bien posicionadas financieramente, mantienen el maíz por una cuestión la rotación. «Está claro que la falta de expectativa de mercado y la de financiamiento no alientan armar grandes planes de siembra», señala.
En los casos bajo arrendamiento, Müller dijo que algunas empresas lo siembran por una exigencia mínima del dueño de campo y aclaró, además, que los propietarios cedieron sus exigencias de superficie de maíz pautadas por contrato, además haber renegociado los precios.