Aseguró que el Gobierno «no tendría que haberse metido ya que De Narváez había dado la orden de retamar todo, vender las máquinas y pagar a la gente; y hoy la empresa está convocada y no vamos a poder cobrar nada”, dijo un proveedor.
La confirmación de que Citrícola Ayuí se presentó en concurso de acreedores en los tribunales de la Capital Federal provocó un fuerte malestar entre los proveedores. Terminaremos pagando “todos los platos rotos”, dicen.
Martin Bellafiori, proveedor de la empresa Citrícola Ayuí, responsabilizó al gobernador de la provincia de Entre Ríos, Sergio Urribarri por “haberse metido en algo que no tenía que haberse metido ya que De Narváez había dado la orden de retamar todo, vender las máquinas y pagarle a la gente; y hoy nos encontramos todos sin laburo y una empresa paralizada”.
“De hecho hasta los mismos empleados querían que se vendiera todo y se indemnice a todo el mundo, pero el gobernador se metió para meter la pata porque hoy la empresa está convocada y no vamos a poder cobrar nada, porque los que terminamos pagando los platos rotos en la convocatoria y en la quiebra somos los proveedores”, puntualizó Bellafiori.
El proveedor aseguró que “todo fue un cuento chino, ya que hoy nos encontramos con que la empresa no puede vender nada porque esta todo embargado y nosotros estamos todos sin laburo y una empresa paralizada”.
Para concluir, Bellafiori señaló que “son alrededor de 120 millones de pesos que debían en total y en tierras para vender solamente tienen $130 millones. Así que ahora esperaremos a ver qué va a pasar, todo sabemos que una convocatoria se presta para cualquier cosa”.