Sin avances en la paritaria de los gastronómicos crece la preocupación de los trabajadores. Si no hay acuerdo con las Cámaras empresarias, el sindicato podría lanzar un plan de acción para las vacaciones de invierno. “Comunicamos a los trabajadores y a los empresarios que si esto no se soluciona nos estamos preparando para salir a pelear por el salario”, dijo Julio Roh, Secretario General de UTHGRA.
La paritaria de los hoteleros – gastronómicos abierta hace dos meses no registra avances significativos. La Unión de Trabajadores Hoteleros Gastronómicos (UTHGRA) consensuó con tres de las cuatro Cámaras empresarias un aumento del 32%. “Para los trabajadores era un porcentaje aceptable, un número interesante”, señaló Julio Roh, Secretario General. Sin embargo, la entidad más importante –FEHGRA– no aceptó. Ofreció un 26%, luego subió un punto y la negociación se estancó.
“Los trabajadores están preocupados, todos los días llaman para ver cuándo sale el aumento. Las bases nos están apurando, nosotros tenemos que apurar a los paritarios que están en Buenos Aires reunidos con las Cámaras. Informan que no hay avances en la negociación, que el Ministerio de Trabajo más allá de convocar a las reuniones, no está haciendo nada”, explicó Roh. Aunque rescata que el Ministerio al menos “está obligando a las Cámaras a ir a las reuniones”.
“El tiempo pasa, ya llevamos dos meses, y llega un momento en que el sindicato tiene que tomar una decisión. Los trabajadores están presionando porque quieren saber cuál es su aumento, necesitan el aumento”, reiteró.
El año pasado Gastronómicos consiguió una recomposición del 35% con una inflación que el gremio calculó en 38%, una pérdida de tres puntos. Este año, la inflación podría cerrar en torno al 30%. De ese modo, buscan compensar la pérdida del último convenio.
Con todo, las diferencias entre los empresarios y el sindicato persisten. “FEHGRA se retiró, no volvió a hacer otra propuesta, entonces no nos quedó más remedio que declarar el estado de alerta y movilización. Comunicamos a los trabajadores y a los empresarios que si esto no se soluciona nos estamos preparando para salir a pelear por nuestro salario. Se acercan las vacaciones de invierno, se vienen los fines de semana largos y vamos a salir a reclamar a la calle el aumento”, avisó.
En principio, pide retomar las negociaciones que incluya una oferta superior. “Hay muchas formas de llegar a un acuerdo, puede ser escalonado. Con el 26% estamos firmando por debajo de lo que estimamos será la inflación. No nos sirve, el trabajador sigue perdiendo poder adquisitivo. Estamos dispuestos a manifestarnos, hacer las marchas que sean necesarias en Buenos Aires y en el interior. Se acercan las vacaciones de invierno y en los centros turísticos vamos a tener que hacer el reclamo, tomar alguna medida de fuerza que no queremos”, subrayó.
Así las cosas, el Ministerio procura destrabar el conflicto con una propuesta que daría más tiempo para negociar y, asimismo, representaría una mejora para el bolsillo del trabajador. Contempla una suma fija no remunerativa por tres meses, a cuenta del aumento que se firme. “La Cámara ofreció 1000 pesos y nosotros queremos $2 mil. No es lo ideal, es un paliativo, pero pasar discutiendo tres meses sin nada en la mano del trabajador”, observó. No obstante, estimó que “en la reunión que tendrán esta semana se pondrán de acuerdo en el monto porque se está estirando demasiado y hay que dar una solución pronto”.
Si las tratativas fracasan “vamos a tener que salir a la calle a reclamar y llevar a nuestros trabajadores a un quite de colaboración, sobre todo en épocas en que el turismo está bajo”, indicó. Y se suma el clima electoral como un elemento adicional. “La gente se cuida, trata de no gastar, tiene incertidumbre sobre qué va a pasar”, señaló.
Remarcó el dirigente que el panorama en la industria hotelera gastronómica “no es preocupante”, con cierre de establecimientos y despidos de personal. Por eso, explicó, “salir a la calle y sostener un paro, justo cuando la gente viene de vacaciones nos genera un problema, no sólo al empresario. Nuestros trabajadores saben mucho de hospitalidad, saben atender a la gente y venir a un lugar donde los trabajadores están haciendo un quite de colaboración o están trabajando a media máquina o directamente no están atendiendo no es la imagen que queremos que la gente se lleve de nuestra zona. El sindicato no busca eso”.
En Concordia, Colón y Gualeguaychú, más el resto de las localidades de la costa del Uruguay, UTHGRA cuenta con 3500 afiliados, con subas sustanciales de inscriptos en temporada alta.
La actual conducción asumió hace un año y medio. Roh destaca que Concordia es una de las ciudades donde más rápido aumentó la recaudación en concepto de cuota sindical. Pasó de ocupar el tercer o cuarto lugar a estar entre las primeras aunque con mayor cantidad empleados. “En Concordia trabajamos mucho para ver esto” y “salvo casos puntuales Concordia está respondiendo al trabajo registrado”, con niveles de informalidad que se mantienen aún por encima del 35%, similares al resto del país.
