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General sancionado por Estados Unidos se convertirá en la cara pública del creciente ejército de China

HONG KONG, 12 mar (Reuters) – El general Li Shangfu, nombrado el domingo como nuevo ministro de Defensa de China, es un veterano del esfuerzo de modernización del Ejército Popular de Liberación (EPL), una campaña que llevó a Estados Unidos a sancionarlo por la adquisición de armas de Rusia.

Aunque su nuevo puesto dentro del sistema chino es visto como en gran parte diplomático y ceremonial, el nombramiento de Li está siendo observado de cerca dados sus antecedentes, dicen diplomáticos regionales.

Su mandato comienza cuando Washington presiona para restaurar el diálogo militar y las comunicaciones que se agriaron cuando Beijing reaccionó con enojo a la visita de agosto a Taiwán por parte de Estados Unidos a través de la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.

La historia de Li como tecnócrata -es un ingeniero aeroespacial que trabajó en el programa satelital de China- lo ayudará a desempeñar un papel clave en el cumplimiento de los objetivos provisionales de los objetivos del presidente Xi Jinping para el EPL, dicen los expertos.

«Los antecedentes operativos y tecnológicos del próximo ministro de Defensa chino son especialmente pertinentes dado que el EPL apunta a convertirse en un ejército de clase mundial para 2049», dijo James Char, un erudito de seguridad de la Escuela de Estudios Internacionales S. Rajaratnam de Singapur.

En 2016, Li fue nombrado comandante adjunto de la entonces nueva Fuerza de Apoyo Estratégico del EPL, un organismo de élite encargado de acelerar el desarrollo de las capacidades de guerra espacial y cibernética de China.

Luego fue nombrado jefe del Departamento de Desarrollo de Equipos de la Comisión Militar Central (CMC), el órgano de defensa gobernante de China, encabezado por el presidente Xi Jinping.

COMPRAS RUSAS

Como director, fue nombrado en las sanciones impuestas por el Departamento de Estado de los Estados Unidos en septiembre de 2018 por la compra de 10 aviones de combate Su-35 en 2017 y equipos relacionados con el sistema de misiles tierra-aire S-400 del principal exportador de armas de Rusia, Rosoboronexport.

Algunos expertos en seguridad señalan que las sanciones, aunque no son un factor decisivo para futuras reuniones, agregan una complicación potencial y podrían proporcionar influencia al liderazgo militar de China.

Cuando se le preguntó la semana pasada sobre el inminente ascenso de Li, el portavoz del Pentágono, el teniente coronel Marty Meiners, dijo que el ejército estadounidense no podía comentar sobre los informes de los medios sobre los cambios de liderazgo de China, pero que habían sido claros al querer mantener las comunicaciones con el EPL.

«Las líneas abiertas de comunicación pueden ayudarnos a gestionar el riesgo, evitar errores de cálculo y gestionar responsablemente la competencia», dijo Meiners.

Oriana Skylar Mastro, miembro del Instituto Freeman Spogli de Estudios Internacionales de la Universidad de Stanford, dijo que es probable que China use la dinámica para obtener ganancias diplomáticas, ya sea presentando las sanciones como irrelevantes si se pasan por alto, o sugiriendo que es Washington, no Beijing, el que no quiere participar.

«El compromiso siempre ha sido una prioridad para Estados Unidos, y China lo ve como una concesión», dijo Mastro.

El mandato de Li en la Comisión Militar Central ha puesto de relieve sus vínculos con Xi, quien ha fortalecido su control en todo el ejército.

Algunos estudiosos creen que Li tiene estrechos vínculos con Zhang Youxia, un aliado militar cercano de Xi, a quien Li reemplazó como jefe del departamento.

Zhang fue ascendido a primer vicepresidente del CMC durante el Congreso del Partido Comunista en octubre, y Li lo siguió en el grupo gobernante de siete personas de la comisión.

Como ministro de Defensa, es probable que Li también esté estrechamente involucrado en las relaciones militares en Asia, asistiendo a eventos como reuniones de líderes de defensa asiáticos y el diálogo informal Shangri-La sobre seguridad en Singapur.

«Creo que ha sido elevado a esta posición porque ha cumplido con Xi Jinping en áreas clave de modernización», dijo el analista de seguridad con sede en Singapur Alexander Neill, miembro adjunto del grupo de expertos Foro del Pacífico de Hawai.

«Este es alguien que tendrá que defenderse frente a una audiencia internacional».

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