Por Guillermo Pérez (La columna de este miércoles en el programa «Despertá con Nosotros» en Oid Mortales Radio) El hecho de que la provincia de Entre Ríos sea una isla no la separa de la tragedia económica nacional. Tragedia que no empezó con la pandemia, ni con el kirchnerismo ni con el macrismo y cuyo origen tal vez no sea tan fácil de identificar, como tampoco sean tan fáciles de identificar los diversos factores que se conjugaron para darle origen y sostenerla.
Lo que sí es más probable que ocurra es que si no tomamos conciencia de que existe, nunca vamos a tomar la decisión de encarar una solución.
Por no hablar de la tragedia económica que viven la ciudad y la provincia caemos en una negación sistemática e incluso en la tentación de creer que estamos bien. A veces esta sensación es inflada desde las usinas oficiales, como con la frase del gobernador Gustavo Bordet: “la provincia está muy ordenada”.
El país hace más de una década que no crea empleo privado y Entre Ríos tampoco. Para colmo en dos años, 420 mil trabajadores perdieron su empleo y el estado sumó 100 mil.
En Entre Ríos no tenemos datos oficiales de creación y destrucción de empleo, aunque algunos estudios muestran que el panorama es muy malo.
Un trabajo publicado en mayo de este año por la Unión Industrial de Entre Ríos revela que de 1,3 millón de habitantes que tiene la provincia trabajan, en el sector privado solamente 127 mil personas. Menos del 10% de la población. La UIER compara ese índice con sus pares de la región Centro y en Córdoba y Santa Fe, más del 17% de la población es parte de la actividad privada.
Los datos precisos son que en Entre Ríos habitan 1,3 millones de personas, en Córdoba 3,7 millones y Santa Fe 3,5 millones. En Entre Ríos en el sector privado trabajan 127 mil personas, mientras en Córdoba hay 479 mil y Santa Fe 482 mil, según el Ministerio de Trabajo de Nación.
Estos datos reflejan que, cada mil habitantes, en Entre Ríos hay 92,2 asalariados registrados privados, cuando en Córdoba hay 127,4 y Santa Fe 136,5.
Por otro lado, el empleo del sector público de cada provincia muestra una situación contraria. En Entre Ríos, la planta de personal del Gobierno provincial + Municipal + Pasivos provinciales es de 171 mil personas, mientras en Córdoba hay 276 mil y Santa Fe 269 mil.
Si uno compara estos valores con la población de cada provincia encuentra que Entre Ríos tiene 124 (asalariados + jubilados) cada 1000 habitantes, mientras en Córdoba hay 73,5 y Santa Fe 76,3.
En nuestra provincia el empleo público provincial y municipal significa 35% más que el nivel de asalariados registrados del sector privado, mientras que en Córdoba y Santa Fe esta relación es inversa, siendo el empleo público 42% y 44% respectivamente menor que el del sector privado.
Lamentablemente no tenemos datos locales de cuál es la composición del empleo en la ciudad. Sabemos sí que tenemos una de las tasas de actividad más bajas del país, apenas por encima del 40% y que en cuanto uno hace un recorrido visual por las actividades económicas el panorama es desolador.
