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Imposible seguirle el paso a la locura de la realidad

Por: Emiliano Damonte Taborda

 

El Aguijón pierde eficacia. Es que nadie lo había preparado para estos tiempos en los que la gente no está dormida, sino que vive aturdida, hiperestimulada. Es editorialmente imposible, seguir el día a día. 

El Presidente Alberto Fernández es una tentación para las plumas enemigas del esfuerzo
El Presidente Alberto Fernández es una tentación para las plumas enemigas del esfuerzo

Energía

Uno encuentra nichos: la energía como símbolo del deterioro es interesante porque es un área donde a los desmanejos de gestión, fácilmente se pueden vincular sus consecuencias materiales. Al fin y al cabo, de una manera muy concreta se trata de fierro y cable, y cuando falla, todos nos damos cuenta muy rápido

 

Evolución del relato

Otro interesante es la evolución del relato, el kirchnerista en particular, porque sigue siendo el regente, al que todos miran para acomodar el propio. La oposición tardó 20 años en articular algo parecido a un “contrarelato”, esperando que la gente apreciara las bondades de la gestión. Costó entender que relato y gestión se manejan en planos diferentes, que no se tocan. 

El “contrarelato” Larrretista es muy interesante, porque no elimina la grieta, que existe y existió siempre, sino que la corre, llevándola lo más hacia afuera en el campo posible, de manera que quede, de acuerdo a la situación actual, en una posición lo más abarcativa posible. Larreta vuelve a leer la realidad después de 20 años y traza una estrategia propia y sencilla, empezando a prescindir del relato K, del que fue presa toda la oposición. No hay nada brillante, pero hoy sobra. La grieta no es un invento kirchnerista, ni de C5N, ni de TN. La grieta es algo que el kirchnerismo supo utilizar y exacerbar con brutal oportunismo, pero no ha sido un invento suyo, como en general no ha inventado nada. El kirchnerismo carece absolutamente de todo atisbo de creatividad. Solo se ocupó de irritar las heridas ya existentes de la sociedad bajo la consigna de la toma de conciencia, para enarbolar banderas que le permitieran obtener votos. Sin la mínima intención de sanar un pepino, porque una sociedad sana te exige otras cosas para votarte.  

 

Carga de la política contra la Justicia

La carga del poder político contra la Justicia es otro tema emblemático, sobre todo por las artistas circenses que alcanza por momentos en nuestro país. No me considero un fino analista de la realidad política, y cuando logro hacer un análisis fino, es tan difícil de escribir que lo abandonó o lo dejó para la radio. Por eso lo grotesco me atrae, porque es fácil de describir. Así es la situación de la justicia en nuestro país, grotesca, caricaturesca, con formas ridículas, obscenas, a veces obvias.  

Me interesa muy especialemnte aclarar que esta carga contra la Jusitcia, que es la bandera del últmo kirchnerismo, no es exclusividad de ningún partido político. El Gobernador Morales en Jujuy es protagonista de una carga feróz contra la justicia, las reformas en Mendoza, Bordet en Entre Ríos, los ataques de Perotti en Santa Fe contra el Ministerio Público Fiscal, Santa Cruz, el tío Gildo en Formosa, en fin, por todos lados.

 

Alberto

Alberto Fernández ha sido otro tema recurrente, que he abandonado bastante este último semestre, un poco como lo hemos abandonado todos.  Pero lo usé mucho, justamente por sus terribles falencias, por su pobreza conceptual, por su falta de brillo, por su miseria. Es una tentación extenderse en describir sus defectos porque son tantos y tan dulces para quien escribe, tan fáciles. ¡Otra vez! Muero de ganas de contar toda la miseria que veo en su figura. Pero no, me voy a resistir. 

Alberto tuvo un enorme mérito, que no se le puede dejar de reconocer. Escondió a Cristina, personaje siniestro y pobrísimo, que no ha dejado de deteriorarse desde la muerte de Nestor Kirchner, y cuya última patética versión, fue eficazmente eclipsada por Alberto Fernández. 

 

La oposición

Las miserias de la oposición son tantas que llevaría varias notas describirlas. Un momento emblemático fue cuando a semanas de haber aplastado al oficialismo en las elecciones, no fueron capaces de sentar la cantidad de parlamentarios que necesitaban para ganar una votación en el recinto, porque uno estaba en el cumple del hijo en Alemania y la otra en Disney. 

 

Entre Ríos (mi pago chico)

En Entre Ríos, lugar en el que desarrollo gran parte de mi labor, la oposición cumple una función netamente periodística. Son trovadores, juglares, cantantes de protesta. El caso de la Fiscal Goyeneche es testimonial. Nos muestra la perversa capacidad de la gente del Gobernador Bordet y del Peronismo entrerriano para maniatar a la Justicia, pero también nos muestra la absoluta incapacidad de la oposición para ponerle un freno, y desafío al que quiera, a que me explique cómo fue que votaron en el Senado por unanimidad el pliego de la Dra. Schumacher para vocal del Supremo Tribunal provincial. Pido disculpas por este exabrupto local tan particular, en una nota de opinión muy general.

 

Se viene un añito…

El sobreflujo de información es un problema sin dudas. La cantidad de información es bestial, nadie puede sostener el ritmo desenfrenado y la velocidad a la que nos somete el sistema. El estímulo al que sometemos a nuestras mentes no da tregua. 

Un poco por eso, el Aguijón seguirá escribiendo cuando tenga tiempo, editando, levantando y citando, a veces acerca de temas que pueden sonar repetidos. Son temas testigos de un deterioro de tal magnitud, que sería imposible de abordar en profundidad todo junto. 

Prometo ir dejando de a poco de escribir sobre las payasadas del Presidente. De a poco, porque uno, no sale fácil de los lugares cómodos. 

Se viene un añito queridos… va a ser muy difícil seguirle el tranco. 

 

Estoy en otro lugar del mundo, acompañando a mi madre en sus últimos días. El dinero acá vale, las góndolas de los supermercados tienen de todos, hay trabajo, todos tienen auto y ni siquiera pensas que te puede pasar algo malo por la calle.   Pero, como cada vez que me toca salir del país, repito: Argentina, en promedio, no es un lugar tan malo para vivir, hace falta poquito, siete años dejemosla crecer en paz. Ojalá sea posible verlo. 

 

Estoy sensible, les dejo mi abrazo y les deseo ojos abiertos y mente “Crítica”, 

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