Elisa «Lilita» Carrió se descompensó este miércoles al mediodía mientras se encontraba en la ciudad santafesina de Esperanza junto a la precandidata a diputada provincial, Lucila Lehmann. Fue trasladada a un sanatorio y quedará en observación hasta que se le realicen todos los estudios médicos pertinentes.
Según las primeras informaciones, la líder de la Coalición Cívica comenzó a sentir mareos y un fuerte dolor en el pecho cuando se disponía a almorzar en Esperanza, en el marco de una recorrida por distintas localidades de la provincia en la recta final hacia las elecciones Paso del próximo domingo. Junto a Carrió y Lehmann también se encontraba María Inés Masino, quien encabeza la lista de precandidatos a concejales de este espacio en la capital provincial. En diálogo exclusivo con Aire de Santa Fe desde la puerta del Sanatorio Esperanza, Lucila Lehmann, brindó detalles de la salud de Carrió: «Se empezó a sentir mal y no pudo ni siquiera almorzar. Sintió un mareo y un dolor fuerte del lado izquierdo», indicó.
En ese momento quienes estaban con la ex diputada decidieron llamar al Servicio de Emergencias 107 que llegó a los minutos. Los médicos la revisaron y decidieron trasladarla a un nosocomio privado para hacerle una serie de estudios a fin de descartar cuestiones mayores, ya que la referente política ya tuvo un infarto en 2015 y tiene antecedentes de diabetes y tabaquismo.
«Es una persona que tiene una salud delicada, entonces hay que tener un protocolo de atención mucho más meticuloso. Ella está bien, está estable, pero después de los estudios nos vamos a quedar más tranquilos», declaró Lehmann, y agregó: «No deja de preocuparnos a todos, pero por suerte está en un lugar donde puede recibir una atención».
Tras el almuerzo en Esperanza, estaba previsto que la comitiva de la Coalición Cívica se traslade a la ciudad de Rafaela, pero todas las actividades quedaron suspendidas debido al inconveniente de salud que atraviesa Carrió.