Redes de Noticias

Kulfas, quiero verla como vos.

Por Emiliano Damonte Taborda

“Damonte, el contexto Damonte, un número solo no significa nada” reclamaba ásperamente un viejo jefe y maestro de mi juventud.

En el primer cuatrimestre de 2021, el “índice de producción industrial manufacturero” creció el 21,3 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior. El Ministro de Desarrollo Productivo no quiso dejar pasar esta noticia y decidió salir a gritarla a los cuatro vientos (o tal vez fue empujado a hacerlo), alcanzando el paroxismo mientras declaraba que nuestra producción industrial estaba creciendo más que muchos países europeos.

Se trata de un concepto muy sencillo. Si la fábrica está cerrada, su producción es igual a cero. Si la abro, aunque más no sea para poner un tornillo en un producto semielaborado, mi actividad habrá aumentado el cien por ciento.

Argentina el primer cuatrimestre del año pasado era una fabrica cerrada, por lo tanto hoy, el más mínimo atisbo de actividad económica, representa un gran aumento. Europa hizo todo lo posible, usó todos los recursos a su disposición (que son enormes) para que la actividad industrial se viera afectada lo menos posible. En pocas palabras, el índice del que habla Kulfas solo expresa la profundidad de la inmovilidad de la industria manufacturera durante la absurdamente larga cuarentena del año pasado.

Ciertamente no es necesario explicarle esto al ministro Kulfas, quien simplemente está manipulando números para hacerles decir algo que le pueda ser útil en este contexto de campaña,

Se lo nota incómodo de a ratos explicando lo inexplicable, incomodo al hablar de inflación y luego desfachatado al sostener que los actuales niveles de emisión monetaria están perfectamente bajo control. Es inevitable relacionar semejante declaración con la de Aníbal Fernández cuando sostuvo que en Alemania había más pobreza que en Argentina, entrando para siempre de este modo, en el olimpo de las barbaridades declaradas públicamente. Aníbal se valió de la ausencia de números, ya que el INDEC estaba directamente anulado, Kulfas pretende valerse de la desinformación y la ingenuidad de la gente.

Ayer el dólar blue tocó los 170 pesos y sin embargo en todos los medios casi se habló exclusivamente de la segunda dosis de Sputnik y de las deficiencias de una campaña de vacunación que va adelante en medio de dificultades, pero va adelante.  Por otro lado las discusiones internas de la coalición opositora por las candidaturas en las próximas elecciones legislativas empiezan a preocupar, o aburrir. En medio de todo este ruido, este caos de información, aparece campante Kulfas declarando el fin de la recesión.

Estemos atentos, esto parece no tener límites, pero los tiene y estos impactan directamente sobre nuestras vidas personales, las de nuestras familias y amigos. La sensación de que todo esto ocurre en otro plano es un engaño. Esto está pasando todos los días en nuestra casa. Si Kulfas golpea su puerta y le quiere vender su “fin de la recesión”, no compre. Ciérrele la puerta en la cara.

Facebook
Twitter
WhatsApp