Mariela Costen, la mujer que fue baleada durante la madrugada del sábado en Concordia, falleció ayer a lunes. A media mañana se había puesto marcha un operativo de ablación de órganos en el hospital Masvernat.
El fiscal que investiga la causa, Martín Núñez, había explicado durante la mañana: “Se realizó el primer electroencefalograma, que no dio signos vitales y cuando eso ocurre se realizan consultas con los familiares para la posible donación de órganos” y agregó: “Luego se debe realizar un segundo electroencefalograma en presencia de un neurocirujano y si vuelve a dar negativo se considera muerte cerebral”.
Núñez confirmó que representantes de Cucaier (Centro Unico Coordinador de Ablaciones e Implantes de Entre Ríos) estuvieron durante el mediodía en el hospital Masvernat y, ante el segundo electroencefalograma plano (sin signos vitales), pidieron permiso a autoridades judiciales para realizar el operativo de ablación.
La familia, que estuvo de acuerdo con la donación de órganos, pide a través de las redes sociales que quienes hayan visto algo colaboren con la investigación.
La causa ahora ya no está caratulada como “tentativa de homicidio en ocasión de robo”, sino que con el desenlace ahora se busca a dos delincuentes por “homicidio en ocasión de robo”.
Mariela Costen, de 40 años, fue baleada en la cabeza en la madrugada del sábado, en un aparente contexto de robo, tras ser abordada por delincuentes cuando caminaba por la calle con una amiga.
Según informó el fiscal del caso, Martín Nuñez, “eran cerca de las 4:20 de la madrugada cuando en Eva Perón y República del Brasil fueron abordadas las dos mujeres, que iban caminando por la avenida, en dirección norte”.
En ese lugar, de acuerdo a las primeras precisiones, “fueron abordadas por dos masculinos que se movilizaban en una moto tipo cross, color roja, según manifiesta una de las chicas, a las que les solicitaron sus pertenencias”, continuó contando el entrevistado.
“Según relata una de las víctimas, uno de los maleantes quedó conduciendo el vehículo”, mientras que “otra persona que se bajó con un revólver”, y les ordenó que “se pongan contra la pared y les pidió las pertenencias”.
Las mujeres “tenían solamente $100”, incluso “por eso se estaban volviendo a sus domicilios caminando”. Es este delincuente el que les ordena “que no miren”, pero “en un momento su amiga se habría dado vuelta la cabeza” y es ahí donde el maleante “le efectuó un disparo a muy corta distancia, en la cabeza”, dijo el fiscal.
La mujer baleada fue identificada como Mariela Costen, de 40 años, jugadora de rubgy.
“Los masculinos se dieron a la fuga en la moto por Eva Perón hacia el sur” y el trabajo investigativo se centraba en la revisión de las cámaras de seguridad. Hasta el momento, la mujer que fue testigo de todo lo ocurrido dio una primera versión del hecho, “pero se le tomará la declaración (oficial) en la fiscalía, cuando pueda estar un poco más calmada”, añadió el funcionario judicial a cargo de la investigación del grave suceso.