El viernes Marta Charadía, directora ejecutiva PAMI en la Costa del Río Uruguay, mantuvo una reunión con representantes del Colegio Médico local para activar una respuesta sobre un acuerdo prestacional. De no concretarse el acuerdo, se realizarán acuerdos individuales con los médicos especialistas para resolver el problema de las prestaciones en la ciudad.
Tras la reunión de legisladores de Cambiemos con el director ejecutivo del PAMI, Sergio Cassinotti, llevada a cabo la semana pasada, la coordinadora de la obra social en la unidad de pronta atención de Concordia, Marta Charadía, manifestó que hubo avances en las negociaciones con el Colegio Médico.
“Ese mismo día se comunicó conmigo la doctora Barros que es la gerente de Prestaciones Médicas, y habíamos avanzado hasta cierto punto, pero siempre el aval político viene bien”, dijo al referirse a la reunión de Cassinotti con legisladores entrerrianos.
“El viernes tuve comunicación con Pablo Corfield que ahora está a cargo del Colegio Médico, y le pedí una contestación sobre la nueva propuesta económica enviada desde el PAMI en lo posible para el miércoles que viene. Existe la posibilidad que si el Colegio Médico no decidiera hacer el convenio, pasaríamos entonces a realizar contratos individuales con cada uno de los profesionales. Esto está dentro de la normativa con la que cuenta el Instituto, pero no quisiéramos llegar a esa instancia”, sostuvo.
“Yo también soy socia de la Federación Médica, pero en este momento estoy cumpliendo una función para que los afiliados tengan las prestaciones, y a su vez todos sabemos que los médicos tenemos un compromiso desde el punto de vista social”, remarcó.
Al referirse a las prestaciones por cirugías, dijo que “éstas se hacen en los casos de segundo nivel, en ese aspecto no hay problema porque los tres sanatorios de la ciudad más el Hospital Centenario, tienen el módulo 69 que incluye la internación más las prácticas que se desarrollen, como cirugías, remplazo de caderas, todas estas prestaciones no están cortadas”.
“Trato de tener abierto los canales de diálogo en todos lados, pero hay decisiones que tienen que tomar los prestadores, y otras que tiene que tomar la obra social. De no llegar a un acuerdo con el Colegio Médico, ya entramos en conversaciones desde hace dos meses de poder hacer convenios individuales con médicos que nos manifestaron querer ser prestadores o a través de los sanatorios, para suplir el módulo de los especialistas que es con el que por ahora estamos teniendo problemas, que es la atención ambulatoria, traumatología, psicología general, en la que se está prestando el servicio”, manifestó.
El valor de la cápita
El valor de la cápita aumentó un 15 por ciento y se fue a 34,20 pesos, que es el valor que analizaron desde el PAMI central para que no hubiese sobreprestación. En este aspecto manifestó: “Se evaluó la tasa de uso, que cada prestador perciba un monto determinado por el total de las capitas asignadas. Ese dinero llega todos los meses al prestador, preste o no el servicio.
“Entonces en el PAMI central evaluaron que la tasa de uso en Gualeguaychú es un poco más elevada que en el resto del país, porque según el Colegio Médico los pacientes demandan más estudios”, añadió.
Asimismo remarcó: “Para reducir esta tasa de uso es fundamental fortalecer al médico de cabecera y esto se lo hemos recalcado a los profesionales en una reunión que tuvimos en Concepción del Uruguay. Lo que pretendemos es que el médico de cabecera haga su tarea desde su conocimiento y luego derive si lo cree necesario, pero que el control, el seguimiento y el conocimiento de ese paciente lo tenga el médico de cabecera”.
“Los estudios complementarios están para evacuar aquellas dudas que el médico pueda tener en el diagnóstico, pero no podemos comenzar por ahí, vamos a tener que hacer una serie de estudios para poder llegar a una conclusión que no pensamos desde lo clínico, que es la base o la madre de todas las especialidades médicas. Este tema de las auditoría y el control lo comenzamos a realizar hace unos meses atrás, es una forma para que los médicos de cabecera estén en contacto con nosotros y al realizar controles de calidad vamos a poder tener mejores prestaciones para nuestros afiliados”, explicó.
Otras de las metodologías de control sobre la calidad de las prestaciones es el contacto permanente con los usuarios mediante llamadas telefónicas o visitas al domicilio.
Al consultarle por si es complicado para el afiliado cambiar de médico de cabecera, Charadía aseguró a El Argentino: “No lo es, ese trámite se hace desde las agencias, en la cual el paciente puede cambiar de médico de cabecera como prestador de segundo nivel. El afiliado tiene libre elección”.