En la próxima sesión de la Cámara de Diputados tomará estado parlamentario un proyecto de Ley por el que se impulsa que en Entre Ríos la fibromialgia sea considerada una enfermedad crónica, que permitiría a los pacientes sin cobertura social acceder a la provisión gratuita de la medicación inmunomodeladora o específica, cobertura integral de los tratamientos de neurorehabilitación, médicos y farmacológicos.
La iniciativa es una copia que realizó Marcelo Bisogni, quien omitió cambiar en el artículo séptimo la autoridad de aplicación, ya que en el expediente 20899, ingresado el 16 de julio, determina que será el ministerio de Salud de Río Negro el que la implementará.
Más allá de los reproches éticos que se le pueden realizar a quien dicta las Leyes, la propuesta es una interesante solución al problema de muchos sujetos que padecen la enfermedad y no tiene cobertura social. Además, se obligaría al Instituto de Obra Social de la Provincia de Entre Ríos (Iosper) a reconocer la enfermedad a aquellos afiliados que certifiquen la patología, incorporándola con una cobertura del 100 por cineto en lo que respecta al tratamiento farmacológico y de rehabilitación que demande la atención de la misma.
PROGRAMAS E INVESTIGACIONES
Por otro lado, el proyecto propone propiciar e implementar programas y cursos de capacitación destinados a las personas que se encuentren afectadas por el síndrome de fibromialgia y su grupo familiar, tendientes a lograr su activa participación en el control y tratamiento de la enfermedad.
Además, se impulsa el desarrollo de programas de docencia e investigación de la fibromialgia, auspiciando la formación y capacitación de recursos humanos especializados para el sector.
¿QUÉ ES LA FIBROMIALGIA?
En los fundamentos de la iniciativa se explica que la fibromialgia “es una dolencia conocida también como la enfermedad silenciosa, siendo algunos de sus síntomas, el dolor crónico en músculos, articulaciones y tendones. Aquellas personas que padecen esta enfermedad además tienen trastornos de sueño, pensamiento desorganizado, y hasta depresión”.
Los síntomas de la enfermedad “no dejan huella, salvo una reducción de la masa del cerebro cuando no está bien hidratada, razón por la cual los afectados sufren de alteraciones en el sueño, rigidez matinal y otras consecuencias de dolor constante”.
Especialistas en reumatología de trayectoria nacional “reconocen que aún existen muchos casos de fibromialgia sin diagnosticar y que las posibilidades de éxito de cualquier tratamiento disminuyen al no haber un diagnóstico precoz”.
Un informe respecto a la enfermedad y sus consecuencias demuestra que las personas que sufren esta patología “se encuentran impedidas de realizar las tareas diarias casi en un 25 por ciento, en tanto que el 60 por ciento de los afectados siente su capacidad disminuida en el 60 por ciento”.