MOSCÚ, (Reuters) – Rusia ve con malos ojos las propuestas europeas sobre garantías de seguridad para Ucrania y no aceptará la presencia de tropas de la OTAN en territorio vecino, declaró el Kremlin el miércoles.
Sin embargo, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, elogió los esfuerzos del presidente estadounidense, Donald Trump, para poner fin a la guerra en Ucrania, calificándolos de «muy importantes», y afirmó que Moscú esperaba que continuaran. Consulte el boletín Morning Bid Europe para obtener información sobre la jornada en los mercados europeos y globales. Suscríbase aquí.
Como parte de un posible acuerdo de paz, los aliados europeos de Ucrania están trabajando para establecer un conjunto de garantías que la protejan de un posible ataque futuro de Rusia.
Sin embargo, Peskov afirmó que un despliegue de tropas europeas en Ucrania implicaría la presencia de la OTAN, algo que Rusia, según él, había intentado evitar desde el principio.
«De hecho, desde el principio, el avance de la infraestructura militar de la OTAN y su infiltración en Ucrania probablemente podrían considerarse una de las causas fundamentales del conflicto que surgió», declaró.
«Por lo tanto, tenemos una actitud negativa hacia estas conversaciones».
Todas las partes coinciden en que las garantías de seguridad para Ucrania deben formar parte de cualquier acuerdo de paz, pero discrepan fundamentalmente sobre su forma. Anuncio · Desplácese para continuar
Rusia afirma que debería ser uno de los garantes de la seguridad de Ucrania y quiere revivir una propuesta que se discutió entre ambas partes en 2022, durante las primeras semanas de la guerra. Kiev la rechaza, argumentando que habría otorgado a Moscú un poder de veto efectivo sobre cualquier apoyo militar externo a Ucrania.
Peskov afirmó que las garantías de seguridad eran «uno de los temas más importantes», pero que Rusia no creía que fuera útil discutirlas en público.
Aseguró que la cumbre entre Estados Unidos y Rusia celebrada este mes en Alaska entre los presidentes Donald Trump y Vladimir Putin había sido «muy sustancial, constructiva y útil».
Trump ha declarado que Estados Unidos no desplegará tropas sobre el terreno en Ucrania como parte de futuras garantías de seguridad. Sin embargo, ha dejado la puerta abierta a otras intervenciones militares estadounidenses, incluyendo apoyo aéreo y de inteligencia.
Peskov afirmó que los negociadores de paz rusos y ucranianos estaban en contacto, pero que no podía precisar una fecha para su nuevo encuentro. La última vez que ambas partes se reunieron cara a cara fue en Estambul el 23 de julio, en una sesión que duró tan solo 40 minutos.